El Fisioterapeuta es el único profesional capacitado legalmente, por su formación universitaria (Diplomatura en Fisioterapia), para poner en práctica la fisioterapia.
El paciente debe ser atendido por profesionales cualificados y tiene el derecho a exigir que le sea mostrada la titulación pertinente. Esto es de gran importancia ya que supone una mayor garantía y confianza para el paciente, tanto terapéutica, como legal.
El fisioterapeuta examina y valora al paciente, hace un diagnóstico fisioterápico, realiza el tratamiento y evalúa los resultados de éste.